En términos generales el imaginario colectivo se traslada a Asia cuando se habla de Artes Marciales; sin embargo, la guerra entre los pueblos de la humanidad se remonta a principios de la era neolítica, y tras dichas guerras han quedado vestigios plasmados en obras de arte en las cuales se aprecian representaciones de batallas que hoy sirven como prueba para rastrear el origen de las artes marciales o de combate.